Nueva noche de playoffs en la que también fueron noticia los Kings, que definitivamente se quedan en sacramento. Primero fueron los propietarios del resto de franquicias NBA, que votaron a favor de no trasladar a la franquicia a Seatle y mantenerla así en la capital del estado de California. Además, posteriormente se ha conocido a través de la ESPN que el 65% de la franquicia californiana ha sido vendida por los hermanos Maloof al billonario Vivek Ranadive, empresario del mundo del software, por 348 millones de dólares.
NEW YORK KNICKS – INDIANA PACERS 85-75 (2-3)
La andadura gris de los Knicks en los playoffs amagaba con cerrar el kiosko de la Gran Manzana hasta octubre. New York necesitaba un golpe de inspiración que pareció encontrar en la propuesta marcial de los Bulls y prolongó la serie un partido más (85-75). El primero en experimentarlo fue DJ Augustine (12 puntos y 0 asistencias) a los 57 segundos. El sustituto del lesionado George Hill recibió una bienvenida hostil por parte de Carmelo Anthony (28 puntos y 6 rebotes). El base de Indiana vislumbró una autopista y enfiló el camino hacia el aro, pero sus huesos acabaron en el parqué por cortesía del placaje del alero de NYC. Lance Stephenson superó el trompazo de su compañero al ir a reventar la canasta y ser reducido por Tyson Chandler. Mike Woodson abandononó el experimento de empezar con Kenyon Martin y Chandler y apostó por el dinamismo de su quinteto más utilizado con Pablo Prigioni (3 puntos y 3 asistencias) poniendo orden. La traca inaugural de New York no amedrantó a unos Pacers compactos que aplacaron el éxtasis local rebajando las pulsaciones del combate. La paciencia de Indiana es un ejemplo a exportar y Paul George (23 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias) tiene una gran cuota de responsabilidad. El All-Star ha perfeccionado el sensor de la solidaridad y alimenta a sus compañeros con la misma elegancia con la que anota.
J.R. Smith (13 puntos y 6 rebotes) salió decidido a elevar sus deficientes prestaciones pero se diluyó con malos porcentajes. Rihanna, expareja del jugador de los Knicks aseguró en su cuenta de Instagram que el escolta había bajado sus prestaciones debido a sus excesos nocturnos. El mejor sexto hombre del año cedió el protagonismo a un secundario conocido en la Adecco Oro. Chris Copeland puso en funcionamiento su versión microondas y anotó 13 puntos en 19 minutos con 4/6 en TC. Con el rebote perdido, NY gestionó con oficio cada posesión (solo 11 pérdidas) y se aprovechó del pésimo 19-33 de Indiana desde la personal. El conjunto local construyó una ventaja de 11 puntos en el tercer cuarto y los administró como si de un tesoro se tratara. Los Knicks dejaron a su rival en un 36% en tiros de campo. El sábado, siguiente match point.
GOLDEN STATE WARRIORS – SAN ANTONIO SPURS 82-94 (2-4)
El oficio de San Antonio echó el candado a la fiesta de Golden State y disputará el trono del Oeste contra Memphis en una final inédita (82-94). La hoja de ruta de los experimentados Spurs no contemplaba las habituales borracheras ofensivas de los Warriors y los aplicados soldados de Popovich liquidaron cualquier conato de rumbosidad. Golden State apenas gozó de dos puntos de renta en 48 minutos. La capacidad de ajuste de San Antonio en esta serie ha sido admirable. Fue capaz de ganar el primer envite recibiendo 127 puntos y finiquita la serie concediendo solo 82. En los últimos dos partidos Harrison Barnes había multiplicado su rendimiento ante el cerrojo que sufrieron Stephen Curry y Klay Thompson. Anoche también se cerró el grifo para el ala-pivot, que terminó con 9 puntos y 4 rebotes.
Los Spurs tienen el cuentakilómetros tan trillado que no necesitan disponer de una gran renta para estar tranquilos. Su máxima renta de ayer fueron 13 puntos, pero su dominio de la situación quebrantó la animosidad de su rival. San Antonio sumaba sin prisa pero sin pausa. Ninguno de sus jugadores emblema se descolgó con una actuación estelar, aunque todos tuvieron su momento de gloria. Tony Parker (13 puntos y 8 rebotes), desnortado durante tres cuartos, anotó 10 puntos en el último periodo. Tim Duncan solo disputó 31 minutos pero acabó como máximo anotador con 19 puntos y 6 rebotes. La figura de Kawhi Leonard (16 puntos y 10 rebotes) es cada día más importante en estos Spurs. Es el chico para todo, porque todo lo hace bien. La solidez ofensiva de San Antonio le permitió anotar los mismos tiros de campo que su rival lanzando 12 veces menos. Stephen Curry (22 puntos y 6 asistencias) ejerció de líder una vez más pero su fatiga le pasó factura sobre todo en los lanzamiento de tres (2/8) mientras que Jarret Jack (15 puntos) aportó la consistencia que le faltó a un desdibujado Thompson (10 puntos).
La final del Oeste comienza el domingo a partir de las 21.30.