La Copa del Rey ACB siempre es especial, pero todavía lo es más si es tu primera edición, ya sea como jugador o como aficionado. Este es el caso de Jabari Parker, el flamante fichaje del Barcelona este verano y que tiempo atrás no hubiera pensado que disputaría esta competición o que tendría el estilo de vida que mantiene actualmente.
JABARI PARKER: UNA CARRERA NBA MARCADA POR LAS LESIONES
Un jugador que ha sufrido un calvario con las lesiones y cuyos inconvenientes físicos no le han dado la llave de la continuidad en la NBA a pesar del talento y sus condiciones. Parker aterrizó en la NBA siendo una de las promesas de su promoción en 2014, siendo escogido por los Milwaukee Bucks en segundo lugar y por encima del actual MVP, Joel Embiid.
Nada más lejos de la realidad, la carrera del ala-pívot comenzó a hacer aguas bien temprano, en su año de novato. De todos moddos, una rotura de ligamento cruzado no le impediría lucirse en su segundo año, en el que jugó 76 partidos y mejorando sus marcas. En su tercer año, llegó incluso a promediar 20.1 puntos por partido.
Pero Parker se confirmó como un jugador de cristal: a los 21 años se volvió a romper el mismo ligamento de la rodilla. A partir de ese momento, ya no sería el mismo jugador y pasó por hasta cinco equipos más. Parker se convirtió en un persona "espiritual", definido por él mismo. Esa calma y resiliencia le han llevado a volver a destacar en el baloncesto, aunque ahora se trate del europeo.