¿Quién no recuerda esos nombres puntuales que lo marcaron para siempre a pesar de durar tan solo un momento? Un grupo de rock al que recuerdas por una sola canción o como mucho un solo disco, ese director que realizó una película perfecta que ya nunca pudo igualar con las siguientes, ese actor que estuvo genial en un papel para luego ser digno de los razzies o ese escritor que escribió el libro con mayúsculas y luego desapareció de la vida pública.

El símil en el baloncesto ACB sería los jugadores extranjeros que tan solo disputaron una temporada en nuestro país pero que causaron tal impacto que los recordamos como si hubieran jugado aquí toda una vida. Es cierto que siguieron mostrando su talento en otras ligas, pero en los 90 el acceso a ver partidos o tan solo vídeos no era como en la actualidad, por lo que una vez fichaban por un equipo de fuera de nuestras fronteras dejábamos de disfrutarlos.

Los finales de los 80 y la década posterior fueron años especialmente destacados de este fenómeno, con nombres que forman parte de la historia de nuestra Liga y por eso el tercer artículo de nuestro serial de “aquellos maravillosos 90” está dedicado a estrellas que brillaron fugazmente en la ACB con una intensidad que quedo grabada en nuestra memoria. 

Traeremos hasta 16 jugadores con George Gervin, Walter Berry y Darrell Amstrong como los más destacados a nuestro juicio, pero veréis que hay todo tipo de nombres que merecen estar en este serial por unos u otros motivos. Lo dividiremos en cuatro artículos y comenzamos con el mítico “Ice man”, Alexander Belostenny, Dallas Comegys y David Benoit.

GEORGE GERVIN: UN MVP Y CUATRO VECES MÁXIMO ANOTADOR DE LA NBA EN MANRESA en la temporada 89/90

En el artículo dedicado al mejor jugador de la historia de los San Antonio Spurs nuestro redactor Andrés Weiss metía en el Top 3 a George Gervin. Entre los méritos de “Iceman” figuran el ser el tercer jugador con más títulos de máximo anotador en la historia de la NBA con cuatro, ganar el MVP en 1980, haber sido miembro del mejor quinteto de la temporada en siete ocasiones y jugar el All Star nueve veces. La mejor liga del mundo lo incluyó en su 50 aniversario en la lista de los mejores 50 de la historia. Así que no cabe duda que cuando Igor Minteguia lo nombraba en este artículo como el jugador con mejor currículum que haya disputado nunca la ACB solo expresaba una realidad incontestable.

youtube://v/0h8wbg-4dZA

George Gervin fichaba por TDK Manresa a mediados de la temporada 89/90, con el equipo catalán viviendo una temporada complicada y encomendándose al jugador que mejor ha usado el “finger roll” en la historia como salvador. A pesar de su historial era un fichaje arriesgado, ya que Gervin tenía 37 años y parecía que sus problemas con las drogas lo habían jubilado hasta que volvió a jugar en la CBA. Sus 25 puntos por partido en los 17 partidos de lo que quedaba de liga regular solo valieron para conseguir tres victorias para el equipo entrenado por el puertorriqueño Flor Meléndez y con jugadores como Jordi Soler, Juanito de la Cruz, Obrad Sarancic, Josep Pujolrás (tristemente fallecido) o un joven Joan Peñarroya que describía en este artículo la calidad de Gervin y lo que supuso su llegada a Manresa:

-¿Por qué era tan bueno George Gervin? Por Joan Peñarroya

Los manresanos se vieron abocados a jugar el desaparecido playoff  por la permanencia y la primera ronda no auguraba nada bueno, ya que perdieron por 3 a 0 contra Valvi Girona de Wallace Bryant, Jordi Pardo, Juan Rosa y Mike Higgins, a pesar de que Gervin anotó 38 en el primer partido, 19 en el segundo y 34 en el tercero. Tocaba jugarse el descenso contra el Tenerife Nº1 de Bobby Lee Hurt, tercer máximo reboteador de esa temporada, Antonio Ray Dawson (25’4 puntos por partido) y Jose Manuel Beirán, plata en Los Angeles. Y George Gervin pareció querer decir que aunque estuviera viejo, en proceso de rehabilitación y con un físico muy castigado no quería tener ese fracaso en su palmarés. Sus números fueron de 39 puntos y 37 de valoración en la victoria del primer partido, 33 y 31 en la derrota del segundo, 43 y 30 en el triunfo en cancha visitante y 31 y 38 en el partido que cerró la permanencia de Manresa.

En su estancia en España dejó exhibición tras exhibición, con dos partidos de más de 40 puntos, trece de más de 30 y esa media de 36’5 puntos en la eliminatoria decisiva. En el siguiente vídeo podéis ver casi entero uno de sus partidos, en el que firmó 34 puntos contra el Huesca La Magia de los míticos Brian Jackson y Granger Hall.

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ALEXANDER BELOSTENNY: LA TORRE RUSA NO BRILLÓ PERO SE LLEVÓ LA COPA DEL REY DE 1990

Alexander Belostenny no destacó especialmente en la única temporada que disputó en la ACB en las filas del Cai Zaragoza, como demuestran sus discretos para la época 11’3 puntos, 8’7 rebotes, 2’2 tapones y 14’4 de valoración. Está claro que son buenos números, especialmente en tapones (3º), pero se esperaba más del gigante ruso tanto en estadísticas como en influencia en el juego. Los maños no brillaron especialmente a pesar de contar con el superanotador Mark Davis, Pepe y Fernando Arcega, Francisco Javier Zapata y Joaquín Ruiz Lorente. No se clasificaron para el playoff por el título en el peculiar sistema de grupos, quedando por debajo de equipos como Caja de Ronda, Estudiantes o Fórum Valladolid. Pero no cabe duda que un pívot que tenía minutos en la URSS de Arvydas Sabonis, con el que a veces compartía minutos, Tachenko, Volkov y Goborov, que ha ganado un Oro olímpico, otro mundial y tres europeos, y que consiguió ganar la segunda Copa del Rey del Cai Zaragoza, es un grande del baloncesto europeo que bien merece estar en este artículo.

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Como decíamos no fue una temporada fácil para el Cai. Moncho Monsalve era el entrenador del equipo pero la irregular temporada y sus diferencias de opinión con el legendario presidente José Luis Rubio provocaron su destitución, haciéndose cargo del equipo Chuchi Carrera con tan solo 24 años. Justo antes de la Copa del Rey cayeron eliminados de la Copa Korac en un polémico partido contra Enimont Libertas Livorno en Italia. Pero en la Copa todo funcionó con Mark Davis como estrella absoluta. Se ganó al Valvi Girona con 32 puntos del americano para enfrentarse luego al Real Madrid contra los que anotó 19. Y en la final se vivió una de las mejores actuaciones individuales de la historia del torneo copero por lo que hacen que esta Copa se recuerde como la de Davis y sus 44 puntos.

Para conseguir ganar el título, el Cai Zaragoza tuvo que enfrentarse a grandes juegos interiores, como los del Real Madrid con Piculín Ortiz, Fernando Romay y Antonio Martín en semifinales, y contra jugadores como Reggie Johnson, Lemone Lampley y Juanan Morales en la final contra Joventut. En ese apartado fue clave Alexander Belostenny, conteniendo a sus rivales con la ayuda de Quique Andreu, dominando el rebote y poniendo grandes bloqueos para el lucimiento de Davis. En la final fue el segundo jugador que más jugó con 39 minutos tras el americano, que no descansó, el máximo reboteador con 9 y el único jugador maño que alcanzó los dobles dígitos con 10 puntos tras Davis. Dejó un gran recuerdo en Zaragoza en general, entrando en su historia con esta Copa y desgraciadamente también hay que lamentar su temprano fallecimiento en 2010.

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DALLAS COMEGYS: UN NÚMERO 21 DEL DRAFT TAPONANDO para puleva granada

Dallas Comegys fue elegido en el puesto número 21 del draft de 1987. Solo estuvo dos temporadas en la NBA con un rendimiento por debajo de las expectativas, a pesar de sus espectaculares condiciones físicas, y como anécdota hay que decir que fue traspasado desde New Jersey Nets a San Antonio Spurs a cambio de Walter Berry, otro de los protagonistas de esta serie de artículos dedicados a jugadores que brillaron una temporada en la ACB de los 90. Puleva Granada lo fichó con la temporada 89/90 ya empezada y debutó en la séptima jornada. Jugó un total de 38 partidos, incluido el playoff por la permanencia, en los que promedió 21’7 (12º)  puntos, 7’9 rebotes (27º) y 20’1 de valoración (12º). Pero si había una estadística en la que destacaba era a la hora de taponar a sus rivales, como muestra su segundo puesto en tapones con 3 por partido tras Arvydas Sabonis (3’6). En el partido contra TDK interceptó hasta 9 tiros de los manresanos, consiguiendo 6 bloqueos en otros dos partidos, sumando 5 dos jornadas más y culminando con hasta 14 duelos con 4 o más txapelas.

A pesar de esos espectaculares números, el recuerdo del paso de Dallas Comegys por Granada es irregular, ya que siempre transmitió los defectos que lo llevaron a no triunfar en la NBA. El 3/4 de Philadelphia era un jugador anárquico, con una mala toma de decisiones en ataque, individualista y con un toque pasota muy considerable o, como diría Andrés Montes, del club “se dejaba llevar”. En este vídeo de los minutos finales contra Huesca La Magia podemos ver varias de las virtudes y defectos de Dallas Comegys, ya que pone hasta tres tapones en los minutos decisivos pero también selecciona mal sus acciones ofensivas y acaba eliminado por una falta en ataque.

youtube://v/ZNyFHUJ63DQ

A pesar de lo comentado en el párrafo anterior, Comegys fue sin duda una de las estrellas que pasó por la ACB en esta temporada y dejó grandes momentos, además de ser totalmente decisivo para la salvación de Puleva Granada. Los andaluces jugaron la primera ronda del playoff por la  permanencia contra el Gran Canaria entrenado por Manuel Hussein y con Greg Stewart y Mark Scheffler como estrellas. Los pupilos de Antonio Gómez se impusieron por 3 a 1 con una actuación sideral de Dallas cifrada en 25 puntos, 9’5 rebotes y 29’3 de valoración.  Salió de Granada con destino al Dinamo Sassari italiano, país donde jugaría dos temporadas más en Bolonia y Siena, para luego irse a Turquía a jugar con Fenerbahce durante tres temporadas. Jugó la temporada 99/00 con Maccabi Tel Aviv, siendo campeón de Liga y Copa, además de subcampeón de la Euroliga.

Dallas Comegys demostró sus grandes condiciones, especialmente su capacidad para taponar y jugar por encima del aro, en multitud de destinos europeos. En el siguiente vídeo de su etapa en el Dinamo de Sassari podéis comprobarlo:

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David Benoit: Otro portento físico en málaga

David Benoit fue uno de los sustitutos de Smith&Smith en Mayoral Maristas y lo cierto es que realizó un gran papel, con números dignos de destacar y una gran espectacularidad como uno de los reyes del mate de la época, pero no consiguió alcanzar la magia que destiló el dúo formado por Ray y Mike. Fue el noveno máximo anotador con 22 puntos por partido, décimo en rebotes con 10’3, cuarto en tapones con 2’3 y quinto en valoración con 26, muy cerca de Ray Smith que quedó cuarto (27’6). Además lideró la clasificación de mates con 2, empatado con Stanley Roberts, que también será protagonista de esta parte del serial dedicado a jugadores de una sola temporada, y el mítico Joe Arlauckas. Igor Minteguia describía así a este poderoso jugador en el artículo en el que elaboró una clasificación de los mejores matadores ACB, situándolo en el puesto número 12: “este alero de 2.03 llegó a la ACB recién salido de la universidad y su temporada en Málaga le sirvió para lograr la experiencia profesional necesaria para dar el salto a la NBA, liga en la que tuvo una larga y prospera carrera. El Dave Benoit que pasó por nuestra liga era una auténtica fuerza de la naturaleza. Su físico era imponente y su forma de jugar explosiva. Poseedor de una capacidad de salto brutal, los mates de Benoit, llenos de fuerza, pero también de plasticidad, fueron una de las sensaciones de la temporada 1990-91. Su duelo con Shelton Jones en el campeonato de mates de aquella temporada fue inolvidable.“

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Tras su temporada con Mayoral Maristas firmó por los Utah Jazz de Karl Malone y Jhon Stockton pero no estuvo en el equipo de las dos finales consecutivas, ya que se fue a New Jersey Nets en 1996. Se mantuvo en la NBA hasta 1998, año en el que fichó por Maccabi de Tel Aviv, ganando la Liga y la Copa. Tras otra temporada más en el equipo de Salt Lake City, jugó la Liga China, quedando campeón, y se retiró en 2003 tras jugar en Japón. Estuvo a punto de volver a jugar en nuestro país, ya que estuvo a punto de fichar como sustituto de Brian Sallier en Lleida en 2001, pero dio la espantado y el que acabó llegando fue Michael Ruffin. En Utah recuerdan bien a David Benoit por ser un buen jugador de equipo, un gran defensor y por sus mates espectaculares.

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