Bàsquet Girona inicia su cuarta temporada en ACB con un proyecto que liderará Moncho Fernández, tras llegar en una situación límite la temporada pasada y conseguir el objetivo de la permanencia.

Mima apuesta por el talento en la dirección

A pesar de sufrir más de lo esperado por conseguir mantenerse un año más en la máxima competición española, la planificación de plantilla de Bàsquet Girona ha sido parecida a la del año pasado. Mismos perfiles pero más seguridad. Ahí reside la diferencia. Tras el punto final de la etapa de Ike Iroegbu en Girona y el paso sin pena ni gloria de Durham, la dirección deportiva ha querido asegurar el tiro.

Derek Needham y Otis Livingston van a ser los encargados de manejar el juego en Fontajau este año. Livingston, de 28 años, viene de Galatasary, dónde promedió más de 15 puntos por partido. Llegó a la F4 de la BCL siendo el verdugo de Lenovo Tenerife. Por su parte, Needham, de 34 años, es de perfil más veterano. Llega para aportar liderazgo y defensa al equipo de Moncho Fernández.

Con riesgo de repetir errores

A estos dos nombres, se les suma Mark Huges, procedente de Betis, Pepe Vildoza, que jugará ACB por primera vez tras destacar en la Americup y en Boca Juniors, y Nikola Maric. Puede sorprender, pero de nuevo, no ha llegado ningún cuatro a Girona este verano. Además, la salida de Yves Pons a Andorra ha dejado totalmente vacía esta posición.

A pesar de ello, Moncho y su staff no están preocupados. Durante muchos minutos de la temporada pasada, ya fueron Sergi Martínez y Mindaugas Susinskas quienes ocuparon esa posición. Seguramente faltos de físico, paliaron sus carencias con esfuerzo en el rebote ofensivo y acierto de tres puntos.

Con la obligación de avanzar hacia objecivos mayores

Lo que si que parece necesario en Fontajau es empezar a pelear por objetivos mayores. Tras tres años de permanencias muy sufridas, el proyecto de Marc Gasol sigue acumulando experiencia y alicientes para dar pasos adelante de forma segura y sostenible.

La llegada de Moncho Fernández, así como la afiliación con el equipo femenino de la ciudad, el Uni Girona, demuestran el compromiso personal y económico que tiene el campeón de la NBA con el proyecto. Ahora, tras la llegada de Fernando San Emeterio en la dirección deportiva, es momento de que los pasos se empiecen a dar en el parqué.