Campazzo y Deck prolongan la fiesta argentina en el WiZink (91-61)

Desaparecidos Brizuela-Gentile: Irreconocibles los anotadores de Movistar Estudiantes en el día de hoy. Acelerados, nerviosos y muy erráticos en la toma de decisiones, no aparecieron cuando más falta hacían para los de Josep María Berrocal. Las tarjetas de tiro son buena muestra de ello con porcentajes muy pobres: 4/15 el italiano y 3/11 el internacional español.

Mal de ojo de Rudy: Poco o muy poco le afectó a Rudy Fernández el hinchazón en el ojo. Un segundo cuarto espectacular secando a Brizuela y anotando 8 puntos consecutivos propiciaría la primera gran ventaja para los blancos. No anotaría más en el resto del partido pero tampoco hacía falta desde que Estudiantes se vio sobrepasado

Día de los argentinos: Con Cook incomodado en ataque por Taylor, Campazzo dio rienda suelta a todo su talentoen los dos primeros cuartos con 6 asistencias y siendo el principal causante de los tiros liberados de sus compañeros. Por su parte, Gabriel Deck, silencioso, imperturbable, anotaba 16 puntos con un notable 75% en tiros de campo y encargándose de defender a Gentile a la perfección. 

Volvía el derbi madrileño a la Copa del Rey después de 14 años y con ambos conjuntos jugando en casa. Con un planteamiento excelente desde el inicio, Pablo Laso buscaba hacer daño con la conexión Campazzo-Ayón y llevando el balon a la esquina para el triple liberado. Lo conseguían los merengues con mucha facilidad mientras que Estudiantes se apoyaba en muy buenos porcentajes para no caer en el marcador. El enésimo pick and roll de los blancos obligaba a Berrocal a pedir tiempo muerto (23-14, min. 8). Habría reacción colegial que culminaría Clavell con un triple a sangre fría en los últimos instantes del cuarto (29-27).

Los telefónicos sufrían en ataque desde que Taylor borraba del mapa a Cook, que no llegaba ni a recibir el balón. Los de Laso pondrían una marcha más con un Rudy desatado y con su rival incapaz de ajustar en defensa. 8 puntos consecutivos del mallorquín daban la primera ventaja por dobles dígitos a los blancos (42-32, min. 16). Berrocal no sabía como recuperar el terreno pérdido y tanto Brizuela como Gentile no ayudaban, desdibujados y erráticos en campo atacante. Con una asistencia maravillosa de Campazzo para Tavares se llegaría al descanso con los de Magariños absolutamente desconectados (50-34). 

Se retomaría la acción con la sensación general de que, si bien se preveía un partido con más emoción, el Real Madrid podría gozar de una ventaja más abultada. Brizuela se intentaba enchufar pero el derbi empezaba a estar escaso de ingredientes dejando un duelo descafeinado en la última eliminatoria de cuartos de final. Los blancos dominaban de forma abismal y Ale Gentile descargaba su frustración con los árbitros. La toma de decisiones del italiano dejó mucho que desear durante todo y se vio sobrepasado, como todo su equipo, durante el encuentro. Los merengues no solo llegaban antes a cualquier balón sino que ponían más ganas en toda la cancha y, de esta manera, aumentaban la ventaja sin oposición. Se llegaría a los últimos diez minutos con el partido decidido (73-48).

No tendría mucha más historia el partido. Un Estudiantes entregado deseaba acabar ya con un duelo que solo tuvo un dominador. Aprovecharían ambos conjuntos para mover el banquillo y sacar a los menos habituales. Todos los integrantes de los blancos acabarían anotando con Tavares como destacado. Finalmente no hubo sorpresa y Movistar Estudiantes dice adiós a la Copa con un partido para olvidar (94-63).