CONSULTA LA SERIE COMPLETA:
El antes y después de una leyenda: Arvydas Sabonis
El antes y después de una leyenda: Tyrone Bogues
El antes y después de una leyenda: Dennis Rodman
El antes y después de una leyenda: Earvin 'Magic' Johnson
El antes y después de una leyenda: Larry Bird
"Siempre creí en mi mismo, sabía que tenía habilidades como talento, velocidad y potencia, y que si las sabía poner en práctica sacaría ventaja respecto a otros jugadores. Este es el tipo de actitud con la que yo cada noche saltaba a la cancha, y siempre pensé que en el baloncesto había un sitio para mí”.
Son afirmaciones de un tipo al que la lógica le decía que el baloncesto no era una buena idea, pero cuya testarudez por alcanzar su sueño se impuso a las barreras físicas con las que contaba de antemano. Por si esto fuera poco, a lo largo de su vida mucha gente se encargó de recordarle que su deseo era inalcanzable, que tirara la toalla, pero nunca desistió en su empeño, ofreciendo una pedagógica lección y alcanzando a su vez el ansiado sueño americano.
22662_0.jpg
INFANCIA DIFÍCIL
Tyrone Bogues nació el 9 de enero de 1965 en Baltimore, Maryland. La atmósfera para la formación de un niño no era la idónea. Creció en una zona de suburbios en la que destacaban las drogas y las fogatas, que daban calor a la mucha gente que vivía en las calles. Su padre era trabajador portuario, y él era el más joven de los cuatro hermanos. Desde una temprana edad, a Tyrone le comenzó a gustar el baloncesto y lo practicaba en la cancha del barrio. Casualmente, entre sus amigos de ‘pachangas’ se encontraban futuros jugadores NBA como Reggie Williams y David Wingate, con los que realizaba concursos de mates con una caja de leche colgada sobre una valla. Cuando cumplió los doce años, Bogues sufrió el primer revés de su vida.Su padre fue inculpado de un asalto a mano armada y condenado a cárcel. Todos los caminos hacia los que se podía dirigir el pequeño de la familia se encaminaban hacia la delincuencia, pero supo bordearla, en parte precisamente por su padre.
22663_0.jpg
Llégo la hora de acudir instituto, y el joven se enroló en las filas del Baltimore's Southern High School. Su calidad no cayó en saco roto. Un entrenador llamado Leon Howard quedó embelesado con aquel pequeño jugador, y le llevó hasta el Dunbar High School, donde el nivel de baloncesto era más cualificado . En su año senior Dunbar ganó 59 partidos consecutivos y Bogues fue nombrado mejor jugador de aquel conjunto, superando a Dwayne Woods, líder del equipo. Además, fue allí donde le bautizaron con el sobrenombre de “Muggsy”, que le acompañó desde entonces. Bogues comenzaba a escribir páginas importantes en su historia, aunque su desconsuelo era seguir viendo a su padre entre rejas.
EN LA UNIVERSIDAD ESTUVO A PUNTO DE DEJAR EL BASKET
Con una gran fama a sus espaldas, llegó a la Universidad de Wake Forest, donde los acontecimientos se desmarcaron del rumbo que parecían predestinados. Aquello no fue como él se imaginaba. Bogues cayó en un gran bache debido a la presión de la universidad. Las clases eran difíciles, y el alumnado no recibía bien a los estudiantes con becas atléticas. Incluso, llegó a replantearse salir de allí y dejar el baloncesto, pero el empeño que siempre había demostrado, se hizo patente una vez más, y decidió seguir el camino con el que siempre había soñado. Con el paso del tiempo, las cosas comenzaron a cambiar y su baloncesto fue en auge, finalizando sus cuatro años universitarios con unas medias de 11,3 puntos, 8,4 asistencias- entre los diez mejores del país-, y 3,1 robos por partido, a lo que sumó 3 rebotes por encuentro, ilógico para su estatura. Wake Forest decidió retirar su camiseta. A partir de aquí, ‘Muggsy’ emprendió el rumbo a la NBA, al igual que hizo 18 años después otro pequeño base, aunque no tanto (1’83), salido de la Universidad situada en Carolina del Norte, y llamado Chris Paul, que siguió el sendero que ya había marcado su predecesor.
22664_0.jpg
Ya en los Bullets, casualmente coincidió con el jugador más alto de la historia de la NBA , el sudanés Manute Bol (2’31), setenta centímetros más alto que él.
Con su primer contrato el pequeño de cuatro hermanos cumplió tres objetivos: Comprarse un Mercedes, comprar una casa nueva a su madre, y como no, contratar a un buen abogado para poder sacar a su padre de la cárcel, que así fue. El sueño americano hecho realidad. Sin embargo, en lo deportivo, al diminuto base la altura le volvió a jugar una mala pasada. El entrenador del equipo, que no contaba para nada con él, llegó a llamarle enano y a menospreciarle como jugador. Parecía difícil encontrar respuestas a esta situación, y la franquicia argumentó que quizás era demasiado bajo para triunfar, a lo que él respondió que ya sabían a quien se iban a encontrar. ‘Muggsy’ había resbalado en su primer intento, aunque no logró no caerse del todo aferrándose a una franquicia que confió en él como Charlotte Hornets donde comenzó a ver la luz. Con la incorporación al antiguo equipo de Gene Littles y especialmente de Allan Bristow todo cambió.
4507_0.jpg
EN CHARLOTTE EXPLOTA
Bristow entendió que debía explotar las cualidades de aquella ‘hormiga atómica’ con un sistema veloz. Rápidos contraataques donde Bogues manejaba la bola como si la tuviera pegada a la mano, y un gran control del juego provocaron que el base encontrara por fin la horma de su zapato. Se sentía a gusto y trasmitía alegría a sus compañeros, entre los que se encontraban Alonzo Mourning y Larry Johnson, lo que se tradujo también en una gran simpatía de los aficionados hacia el equipo de moda por entonces. En 1990, el ex de Dunbar parecía ya un jugador consagrado. En la temporada 93-93 10.8 puntos y 10.1 asistencias en 77 partidos, segundo mejor registro estando tan sólo por debajo del gran John Stockton. De entre los cuatro cursos anteriores ya había promodiado más de 9 con el tope de su carrera en la 89-90 acreditando 10.7 pases de canasta, atrás dejaba a gente de la calidad de Isiah Thomas, Terry Porter o Mark Price. El siguiente año se iría hasta 8.7 y su equipo caería en primera ronda de los playoffs ante los Chicago Bulls a los que volvió a acudir Michael Jordan . Bogues también destacó por robar muchos balones. Muchos bases reconocieron que era muy incómodo para ellos que les presionaran el bote del balón desde tan abajo. El base de Baltimore volvía a explotar sus virtudes a un 200%.
Cumplidos los diez años en la NBA le traspasan a Golden State, y a partir de ahí las lesiones le comienzan a lastrar. El esfuerzo realizado durante tantos años por contrarrestar la escasez de centímetros con un gran tono físico le minó sus posibilidades de continuar realizando un juego eléctrico, y tras un breve paso por los Toronto Raptors, se retiró. Quedan en el recuerdo esas carreras a lo largo de toda la pista en tres segundos en las que los contrarios eran incapaces de robarle el balón debido a lo bajo que lo botaba y esas penetraciones sin ningún tipo de rubor. Aunque si hay que destacar una jugada en particular, la más espectacular podría ser: ¡¡¡el tapón que le colocó a Patrick Ewing (2.13), uno de los pívots dominantes del momento!!!
ACTUALIDAD
3151_0.jpg
CONSULTA LA SERIE COMPLETA:
El antes y después de una leyenda: Arvydas Sabonis
El antes y después de una leyenda: Tyrone Bogues
El antes y después de una leyenda: Dennis Rodman
Comentarios
luiki78, ¿Cuántos bases había entonces mejores que el, sin sitio en la NBA?
Es posible que la titularidad en la NBA le viniera grande, porque lo cierto es que en defensa sufría mucho (los rivales tiraban por encima de él con demasiada comodidad). Pero demostró ser un buen jugador y no la atracción de feria que parecía en sus primeras temporadas.
Ejemplo de superación, yo lo recordaré por aquel marcaje a Petrovic (y por comer patatas fritas en el banquillo, como reconocía). A pesar de esto, en la NBA sufría mucho cuando lo llevaban al poste y, como se ha apuntado, se lanzaba con facilidad por encima de él. Por cierto, en el 86 creo que todavía Kukoc no se había incorporado a la selección plavi (Divac, sí, por sus famosos dobles en la semifinal).
Que bonito era aquél equipo de Charlote, el cinco inicial jugaban con los dorsales 1 al 5, o salían corriendo como galgos o se la jugaba "la abuela de Urkel", pero nada más, y los Bulls se los merendaban fácil. La verdad es que este tio nos caía bien a todos, aunque sólo lo hubieran fichado en Wash.B. para tener pareja de circo, el más alto y el más bajo, cosas del marketin americano. Los partidos NBA que yo tengo me los he bajado todos con el Emule, en NBA.com se pueden ver, pero pagando y hay otra página que se llama "tarjeta roja" o algo similar que tiene cualquier deporte, pero muchos también son pagando.
Admirable jugador
Tuve la gran sensación de verle en directo en el Mundial del 86, en un Italia-EE.UU. Me impresionaron dos cosas, la primera obviamente su escasa estatura, y la segunda la rapidez con la que lanzaba el juego, era coger la bola y salir corriendo. Un gran jugador. Por cierto gran selección USA la del mundial de España.
wow!! vaya historia, digna de Hollywood, ahora que están en crisis de ideas, podían tirar de aquí. Felicidades por tan buen artículo
por que no hablan en cifras de hasta donde llego,a mi no me parecia unjugador NBA y menos en la mejor epoca de la liga
De pequeño era mi ídolo. Cuando tenía 7 u 8 años, en una camiseta gris de tirantes escribi en grande, y con un rotulador, su nombre y número.
Gracias por estos artículos. Me gustaría saber qué fue de Harold Miner...
alguien me podria decir donde ver o bajar partidos nba
gran articulo para un GRAN JUGADOR
excelente marcaje sobre petrovic. no se habló de otra cosa. a mi me gustó mucho derrick mckey y diria que kenny smith jugo muy bien tambien
Saludos, liuki78! Hemos añadido algunas estadísticas de Bogues para que entiendas su valía ante los números. Gracias.
Bon dia, admirable jugador (el preferido de mi padre) pero kukoc no habia debutado ni en la jugoplastika. Recuerdo un partido despues de ese mundial, de korac del barça en split que en el descanso un flaco zurdo tiraba y pere barthe dijo "señores fijense en este jugador que va a ser una estrella". las figuras de aquella jugoplastika entrenada por slavnic que jugaba korac eran radja y perasovic y el era el junior. Inolvidable.
Que grande era este jugador. Excelente artículo
vaya vaya...
de verdad el mejor jugador de la nba, sin tener los atributos para llegar a la Nba...
ejemplo de constancia y de nunca darse por vencido sin importar los obstaculos...
jugadores asi hacen mucha falta hoy en dia en una liga muy acomodaticia y donde parece que la gente con llegar ya tiene...