Se sabe que en los últimos partidos de fase regular de la temporada suceden hechos improbables, sorprendentes e inesperados, porque varios equipos tienen la mente puesta en la postemporada, mientras que algunos jugadores aprovechan para mostrarse.

Ese fue el caso de Malachi Flynn, un jugador que no es de renombre y que sorprendió a la NBA al anotarle 50 puntos a Atlanta Hawks. Igualmente, su equipo, Detroit Pistons, perdió. Sin embargo, su actuación quedará para la historia como la más inesperada de la historia.

Los 50 puntos de Malachi Flynn fueron los más sorprendentes

¿Por qué es inesperado que Flynn anote 50 puntos? Bueno, porque su promedio en esta temporada es de 4.6, mientras que en su carrera registra un 5.2. Es más, su récord de anotación en un partido era de 27 tantos. Es apenas el tercer jugador que sale del banquillo y anota 50 tantos en toda la historia.

Es más, es el único jugador en la historia en anotar 50 puntos en una noche sin tener una temporada en la que promedie 10 tantos. Su mejor campaña fue la de 2020-2021, donde registró una media de 7.5.

Anotaciones de 50 puntos inesperadas de la NBA

Tracy Murray (1998)

Antes de la temporada 1997-1998, Tracy Murray promediaba 9.4 puntos por juego y para aquel entonces, mientras que la mayor cantidad de disparos que había acertado en un juego era de 15.

Sin embargo, el 10 de febrero de 1998 jugó el partido de su vida contra Golden State Warriors, consiguiendo 50 unidades para darle la victoria a Washington Wizards por 99-87.

Corey Brewer (2014)

Corey Brewer había disputado 6 temporadas en la NBA antes de regresar a Minnesota Timberwolves en la campaña 2013-2014. El l 11 de abril fue su gran noche, cuando le anotó 51 tantos a Houston Rockets.

El promedio anotador de la carrera de Brewer es de 8.7 puntos. Antes de ese partido, su máxima en un juego era de 29. Estuvo desatado esa noche, terminó con 51 puntos, con 19/30 en tiros de campo.

Walt Weasley (1971)

Walt Wesley es una leyenda de Kansas Jayhawks, pero en la NBA no tuvo demasiado impacto. Con un promedio de carrera de 8.5 puntos, tuvo el segundo partido de 50 tantos más improbable de la historia, solo detrás del de Malachi Flynn.

Jugando para Cleveland Cavaliers en 1971 tuvo una actuación apoteósica de 50 puntos ante el equipo que lo había seleccionado, los Cincinnati Royals.