El Real Madrid Baloncesto perdió contra Estrella Roja en un duelo de Euroliga marcado por la tensión arrastrada del pasado curso. Los blancos dejaron a deber en el segundo partido de la jornada doble de Euroliga en Serbia. De nuevo, el caballo de batalla de Sergio Scariolo fue la rotación al cinco, Eddy Tavares, Usman Garuba y Bruno Fernando, bajo la lupa.
¿Qué necesita el Real Madrid Baloncesto de su pívot?
El cuadro de Scariolo volvió a sufrir con su rotación interior. Por un lado, Eddy Tavares ya no es tan determinante como antaño. Su dificultad de acumular esfuerzos rápido y su pérdida de movilidad lateral le permiten mantenerse como un gran intimidador, pero ya le cuesta cubrir sus espaldas. Bruno Fernando sigue sufriendo a nivel táctico defensivo, mientras que Usman Garuba, por perfil, no acaba de ser ese protector de aro que necesitan el Real Madrid Baloncesto.
El conjunto madridista es un equipo que tiene varios perfiles con dificultades defensivas, Trey Lyles, Theo Maledon o Mario Hezonja acostumbran a ser superados con relativa facilidad. Por otro lado, los mejores defensores del Real Madrid Baloncesto son jugadores que toman muchos riesgos. Andrés Feliz, Campazzo o Kramer van siempre muy cerca de balón, así como de las líneas de pase. Estas dos circunstancias hacen clave que el cinco sea un gran intimidador bajo aro y, ahí, Usman Garuba no destaca.
Usman Garuba mejora a Fernando, pero no acaba de hacerse con el puesto
Usman Garuba es un jugador con una capacidad defensiva en términos de defensa exterior y de transición increíble. En momentos de defensa de cambios es, sin duda, el gran seguro del Real Madrid Baloncesto en la posición de cinco. Sin embargo, parece que Sergio Scariolo necesita más minutos otro tipo de perfil. Bruno Fernando, a pesar de que por condiciones podría ser ese intimidador, sigue con dificultades tácticas para desempeñar ese papel.