La temporada llega a su punto álgido y no solo por lo que hay en juego en la pista. La final de la Liga Endesa ante Valencia Basket será mucho más que una lucha por el título: también puede decidir si Chus Mateo sigue al mando del equipo o si la dirección técnica decide dar un giro de timón de cara al curso 2025‑26.
Contrato y condiciones para seguir
Chus firmó su renovación en verano de 2024, con contrato hasta 2026 y la misión de sostener el nivel competitivo del equipo en los momentos decisivos. La eliminación demasiado pronto en Euroliga y los tropiezos en los “títulos caseros” han dejado sensaciones muy contradictorias en la entidad blanca, por lo que esta final ACB se puede llegar a percibir como un examen definitivo para su proyecto.
Los pros de una final ganada
El equipo ha mostrado fortaleza, ha firmado una racha de 26 victorias seguidas en Liga Endesa digna de mención. Superados los playoffs y la capacidad de sobreponerse a eliminatorias complicadas, el técnico ha reforzado su crédito. Una victoria no solo aplacaría las críticas, sino que reforzaría su liderazgo en el vestuario y su plan deportivo, aún más tras imponerse en una exigente semifinal contra Unicaja en la que el Real Madrid ha demostrado “muchas cosas”.
Qué implicaría perder la final
Una derrota puede abrir la puerta a cambios. En un entorno tan exigente, hablar de sustitutos no es extraño si el club falla en su objetivo. De entrada, el margen es estrecho y, aunque no hay ultimátums públicos, el debate interno se encendería rápidamente ante un tropiezo.
El margen de la dirección técnica (y el desgaste)
Se ha cuestionado el desgaste acumulado durante la temporada: plantillas muy renovadas, rotaciones ajustadas y un calendario extenuante han pasado factura. El propio Chus reconoció en otras competiciones que el esfuerzo se notó físicamente. Y aunque el vestuario se mantiene unido, varios rostros visibles han apuntado a cierta fatiga que quizá también afecte al propio entrenador. En ese contexto, si el club percibe señales de desgaste, ganar la final sería más que un título: sería una demostración de recuperación y energía, clave para extender el proyecto de Mateo.