Hay hechos locales que nos llevan a debates universales. En la irregular temporada que está realizando Monbus Obradoiro nos encontramos con una de esas discusiones tan viejas como el baloncesto o, más bien, como casi cualquier deporte de competición: ¿baloncesto de ataque o de defensa?

"La mejor defensa es un buen ataque"-frase anónima atribuida a varios personajes históricos como Napoleón, Sun Tzu o Churchill.

"Un buen ataque gana partidos, una buen defensa campeonatos"-Chuck Daly (aunque hay dudas sobre quien la usó primero y también tiene su similar en fútbol donde hay quien atribuye a Valerio Bianchi la de "un delantero gana partidos, una buena defensa campeonatos" aunque también se comenta que sale de Boskov o Gregory)

En este artículo vamos a analizar una serie de datos, que ya reconocemos previamente que son sesgados y sin entrar en la estadística avanzada, para retomar el debate sobre que baloncesto prefiere mayoritariamente el público. Como comentábamos, la temporada del Obra, irregular en todos los sentidos, ya que no solo está marcada por las rachas de victorias o derrotas si no también por desarrollar estilos de juego totalmente diferentes, ha reabierto un debate eterno en el mundo del baloncesto entre la afición obradoirista. A través de las redes sociales, del Foro ACB del propio equipo o de los comentarios de la propia afición en a Caldeira do Sar hemos comprobado que es una discusión recurrente tras estos últimos cuatro partidos del equipo.

El equipo gallego realizó su mejor arranque histórico en esta temporada 2017/2018 basándose en una de las mejores defensas de la competición como analizábamos en este artículo: Monbus Obradoiro, la mejor defensa para el mejor récord. En ese momento el Obra estaba cuarto en la clasificación de la ACB, siendo el equipo que menos puntos totales recibía y también el que menos puntos totales anotaba. En dicho texto analizábamos algunas estadísticas avanzadas para ver la mejora en el ratio defensivo de una temporada a otra, que no vamos a valorar ahora, ya que queremos abrir un debate más genérico y no toda la afición ACB discute en términos de ratios o de tasas de uso ofensivo, ya que más bien se habla de si nuestro equipo llega a los 100 puntos mientras otro nos contesta "ya, pero si nos meten 102…".

En las últimas 4 jornadas los compostelanos han anotado una media de 99'5 puntos, pero solo han sumado una victoria, producto de los 103'25 recibidos. Con estos números serían claramente el primer clasificado en puntos anotados y el último en puntos recibidos. Es cierto que han jugado tres prórrogas en esas cuatro jornadas, pero, si descontamos los tiempos extras, las medias quedarían en 93 a favor y 92'25 en contra, liderando igualmente ambas clasificaciones. Observando los números de toda la temporada, comprobamos que Obradoiro ha descendido del primero al octavo puesto en puntos recibidos, mientras que ha ascendido al 14 en anotados. También que han pasado de ser los cuartos por la cola en porcentaje de tiros de tres al séptimo puesto tras la última jornada. Tras 26 jornadas, los gallegos han dado la razón a todos los análisis que hablaban de un equipo hecho para anotar, como el nuestro en el que hablábamos de los muchos pistoleros que íbamos a ver en O Sar, tras llevarnos la contraria tres cuartas partes de la temporada.

Es evidente que el porcentaje de acierto exterior en estos cuatro partidos ha sido una de las principales claves de esta subida anotadora. El Obra ha tenido un porcentaje espectacular del 47'5% en tiros de tres durante esta racha, cuando el del mejor equipo de la temporada, el Valencia Basket, es del 41'72%. Pero también hay algunas claves individuales centradas en tres jugadores: Eimantas Bendzius, en su mejor racha de la temporada, participó de los dos primeros partidos con 16 y 20 puntos. Tras su lesión, Benjamin Simons, jugador bastante residual hasta ese momento y con una media de 4 puntos, se fue hasta 17 y 16 en los duelos en los que no estuvo disponible el alero lituano. 

Y por último y posiblemente más importante: Matt Thomas. Tras unas cuantas jornadas erráticas en su rendimiento tras la lesión sufrida en uno de sus dedos, algo vital para un tirador, The Iceman ha batido sus récords anotadores en ACB en dos semanas consecutivas con 29 y 30 puntos. El americano ha promediado un brutal 63% de acierto con 12 de 19 triples entre esos dos partidos.

En el apartado negativo, el defensivo, también podemos individualizar algunas causas como son las pequeñas lesiones que ha sufrido Pepe Pozas y que le han impedido realizar esa labor de punta de lanza de la defensa con la regularidad que la realizó a principios de temporada, la baja de Eimantas Bendzius, clave en la ayuda en el rebote y en la defensa de aleros altos, en los últimos dos partidos, y la bajada de rendimiento de Artem Pustovyi, muy marcado por un exceso de faltas personales pitadas en esta segunda vuelta y que ha perdido el liderato en tapones que había ejercido durante toda la liga. Esto último ha hecho que el Obra bajase de la primera posición en cuanto a tapones realizados a la tercera.

A simple vista podríamos decir claramente que el ataque de los de Moncho Fernández ha mejorado muchísimo recordando que anotaba 73'75 en la racha inicial, pero también que la defensa ha pasado de ser la mejor con 72'88 por partido a convertirse en un auténtico coladero. Claro que actualmente hay otro debate muy interesante que, como el de defensa o ataque, está en la afición, pero también mayoritariamente en la prensa especializada en baloncesto y particularmente en nuestra propia página:

Así que aquí podemos establecer otro punto de discusión al que podéis aportar todas vuestras opiniones: ¿la estadística avanzada es la panacea en los análisis deportivos o podemos seguir manteniendo discusiones con datos tan simples como los puntos anotados por partido?

Por aportar mi opinión contraria a nuestro coordinador ACB en este sentido, para abrir el debate digo que el que más puntos anota por partido muestra no solo su capacidad anotadora si no que juega a muchas posesiones, que equivale a decir que juega más al ataque. No niego que las estadísticas avanzadas son una herramienta tremendamente útil en el mundo del baloncesto, y que el ataque más efectivo es evidentemente el que mejor ratio por posesión consigue, pero me resisto a opinar que es mejor un juego ofensivo que consigue 80 puntos frente a uno que consigue 100, pese a que su efectividad sea mayor.

Por añadir un último elemento a la discusión, puede haber quien diga que esta solo está abierta porque no se ha ganado un solo partido y se han perdido los otros tres, que con todo victorias nadie estaría hablando esto. Es bastante posible, pero también hay que decir que la afición obradoirista siempre ha apreciado tanto una lucha por un balón como una canasta, que la palabra que más repite su speaker es "defensa" y a Caldeira se identifica con el esfuerzo y el trabajo duro.

Como comentábamos al principio, la idea de este artículo es abrir el debate, dando un nuevo marco a los aficionados del Obra para seguir debatiendo, ampliarlo al resto de aficionados ACB e incluso incluyendo a los propios redactores de Solobasket. Las preguntas serían estas:

​Esperamos vuestras contestaciones tanto en los comentarios, como por nuestras redes sociales.