El Real Madrid de baloncesto tropezó por primera vez en casa ante el Anadolu Efes (64-74), encajando su primera derrota como local en esta Euroliga y dejando unas preocupantes sensaciones sobre su juego. Con solo seis puntos anotados en el primer cuarto y una desventaja que llegó a los 25 puntos, el equipo blanco se mostró frustrado y sin respuestas ante un rival directo. Tras el partido, Chus Mateo fue autocrítico y envió un mensaje claro: falta de respeto hacia el rival y una mentalidad errónea desde el inicio.

UNA NOCHE GRIS PARA EL REAL MADRID EN EUROLIGA

El encuentro arrancó con un Real Madrid desconectado, algo que el Efes supo aprovechar desde los primeros minutos. El exmadridista Vincent Poirier brilló en su regreso al WiZink Center, liderando a su equipo junto a Elijah Bryant y Darius Thompson, quienes anotaron en momentos clave. El primer cuarto terminó con un demoledor 6-19 para los turcos, dejando a los locales completamente fuera de ritmo.

En el segundo cuarto, la situación no mejoró. Los triples fallados y la escasa actividad defensiva permitieron al Efes alcanzar una ventaja de 25 puntos antes del descanso. Solo Facundo Campazzo, con 20 puntos totales, y Mario Hezonja, con 13, lograron mantener algo de esperanza para los blancos en una segunda parte donde intentaron una heroica remontada que no fue suficiente.

CHUS MATEO LO ADMITE: “CUANDO LLEGAS REMANDO TANTO TIEMPO…”

Tras la derrota, el entrenador merengue no dudó en señalar los errores clave de su equipo: “Hemos empezado con la mentalidad errónea, respetando poco a un rival que venía haciéndolo muy bien. Concedimos demasiadas licencias en la primera parte, lo que marcó el resto del partido. Nos hemos confiado y eso no puede pasar”.
 
“El orgullo y el carácter nos permitieron acercarnos, pero cuando llegas remando tanto tiempo, es difícil competir en igualdad. Necesitamos empezar los partidos con otra mentalidad”, explicó Chus Mateo sobre cómo el equipo mejoró en la segunda mitad, pero lamentó que fuera demasiado tarde para revertir el resultado, con demasiada fatiga acumulada y habiendo utilizado realmente a seis jugadores en el partido.

Con esta derrota, el Real Madrid queda con un balance de 4-6 en la Euroliga, algo alarmante para un equipo que aspira a estar en la élite del continente. Chus Mateo tendrá que trabajar en recuperar la confianza y la frescura física de sus jugadores, quienes se mostraron visiblemente fatigados. El equipo tendrá poco tiempo para lamentarse, ya que el calendario no da tregua y los próximos compromisos serán decisivos para su posición en la tabla. Sin embargo, si no ajustan su enfoque desde el inicio, la temporada podría complicarse más de lo esperado.